Ensalada con Aliño de Frutos Secos (receta de mi hija Cecilia)

Ingredientes (4 raciones):

Para la ensalada: Lechuga, 50 g de tomates secos (147 Kcal/100 g), 60 g de queso tipo gouda o manchego, 30 g de cebolla seca frita (600 Kcal/100 g) y picatostes (20 g de pan frito).

Para el aliño: 50 g de frutos seco (pistachos, pipas, almendras, anacardos), 30 g de mayonesa, 10 cc de aceite de oliva virgen extra, sal, vinagre  y crema de módena.

Elaboración

La ensalada: cortar el pan en cubitos y freírlo en abundante aceite. Escurrir bien y colocar sobre papel de cocina para desengrasar. Reservar. Se añaden todos los ingredientes de la ensalada (el queso cortado en cubitos) a una ensaladera.

El aliño: Se pican no muy finos los frutos secos y se mezclan con el resto de los ingredientes. Se aliña la ensalada con ello.

• Los frutos secos han sido adquiridos en Fermín de Pas,  comercio muy entrañable, cuyos dueños te asesoran estupendamente, como ya hemos comentado en otras recetas.  
• Este plato es apto para vegetarianos, Diabéticos (ajustando el tamaño de ración a las calorías permitidas) e Intolerantes al Gluten. No es apto para veganos ni Intolerantes a la Lactosa.
• Las lechugas forman el género Lactuca y pertenecen a la familia de las asteráceas (compuestas). Esta familia, cuyo nombre actual deriva del griego Aster (estrella), se caracteriza porque sus flores están compuestas por la fusión de cientos e incluso miles de flores diminutas. Todas las lechugas que se cultivan hoy en día derivan de la humilde Lactuca sativa, la «lechuga silvestre» con hojas más pequeñas y duras, sabor acre y pequeñas flores amarillas que salen en verano y crecen como mala hierba en los terrenos baldíos de buena parte de Europa y Asia. Los botánicos no se ponen de acuerdo sobre su origen. Conocida por sumerios, egipcios, persas, griegos y romanos, es una planta cultivada desde hace muchos años. Los egipcios representaban a Min, dios de la fecundidad y protector de las cosechas, por una lechuga. Los antiguos griegos y romanos la expandieron por toda la cuenca mediterránea. Y estos últimos tenían la costumbre de consumirla antes de acostarse después de una cena abundante para así poder conciliar mejor el sueño. Las cuatro variedades hortícolas comunes son la lechuga de cogollo, la de hoja rizada, la romana y la de tallo. La de cogollo forma una cabeza parecida a la de la col; la de hoja rizada produce hojas separadas, que no forman cogollo; la romana forma un cogollo largo y erguido y la de tallo tiene un tallo grueso comestible y hojas de sabor desagradable. Planta herbácea anual. En la actualidad, la lechuga es una verdura cultivada al aire libre en zonas templadas de todo el mundo y también en invernaderos por lo que se encuentra en los mercados españoles y en su mejor momento de consumo durante todo el año. Porción comestible 74 gr por cada 100 gr de producto fresco, 17 Kcal/100 g. La lechuga es un alimento que aporta un bajo contenido energético por su alto contenido en agua y su escasa cantidad de hidratos de carbono, proteínas y grasas. En cuanto a su contenido en vitaminas, podemos mencionar que es fuente de vitamina C (12 mg), vitamina A (29 microg) y folatos (34 microg). El aporte de minerales tampoco resulta especialmente significativo, aunque sí posee pequeñas cantidades de fósforo, potasio, hierro y calcio. Sin embargo, es preciso tener en cuenta que las hojas de color verde intenso, que por lo general suelen ser las menos tiernas, son precisamente las más ricas en vitaminas y minerales. Contiene flavonoides, fundamentalmente quercetina; seguida de kaempferol, y cantidades inferiores de miricetina, luteolina y apigenina. La lechuga también aporta pequeñas cantidades de b-sitosterol, stigmasterol y campesterol, fitoesteroles que participan en importantes funciones biológicas del organismo. (Fuente: Fundación Española de Nutrición).
• Esta ensalada es rica en fibra, proteína animal y vegetal de alta calidad, vitaminas A, E calcio, sodio, hierro  fósforo y ácidos grasos omega 6. Contiene ácidos grasos omega 3, vitaminas (D. K, grupo B completo y minerales (magnesio, potasio, selenio). 
• Las verduras, por su riqueza en vitaminas, minerales y fibra, y su apoyo en la fracción proteica son indispensables en la dieta sana y equilibrada de todos y especialmente obligadas en la dieta del deportista. En TODAS las comidas ha de haber una ensalada y un plato de verdura, bien como plato básico o como acompañamiento. Se deben elegir frescas o ultracongeladas.
• Comentarios para Deportistas: Este plato es una buena fuente de vitaminas, minerales, ácidos grasos omega 3 y 6, es ligero, y aporta escasa cantidad de grasas, siendo por ello adecuado para la dieta de entrenamiento, así como para formar parte de la comida precompetición.
• Aporte calórico: La ensalada aporta 650 Kcal y el aliño, 600 Kcal, total 1250 Kcal (312 Kcal por ración).