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martes, 23 de septiembre de 2025

Natillas sin Azúcar Aptas para Diabéticos (receta de Puri)

Ingredientes (6 raciones):

700 g de leche semidesnatada, 3 huevos, 15 g de Maicena, 11 g de edulcorante líquido  (Ciclamatosodico+ Sacarina), un poco de canela y 1 galleta María Dorada 0 azúcares por ración (6 g por galleta, 25 Kcal por unidad). 

Elaboración:

En Thermomix: Poner en el vaso el edulcorante, los huevos, la leche y la maicena y programe 8 min⁠/⁠85°C⁠/⁠vel 3.5. Después, retirar el cubilete y mezclar 2 min⁠/⁠vel 3. Verter las natillas inmediatamente en boles individuales o una fuente honda. Poner una galleta maría dorada 0 azúcares en la superficie, dejar enfriar y servir espolvoreadas con canela.
De la manera tradicional: Disolver la maicena en un poco de leche y añadir a la leche con el edulcorante. Añadir los huevos batidos y  batir todo en la minipimer. Cocer a fuego muy lento sin dejar de revolver unos 10 minutos. Dejar enfriar y servir espolvoreandolas con un poco de canela. Se puede poner una galleta tipo maría  0 azúcares en la superficie.




  • Es un postre apto para vegetarianos, Diabéticos (ajustando el tamaño de la ración a las calorías diarias permitidas) e Intolerantes al Gluten. No es apto para veganos ni Intolerantes a la Lactosa. 
  • La Leche: Según el Código Alimentario Español (CAE) se entiende por leche natural el producto íntegro, no alterado ni adulterado y sin calostros del ordeño higiénico, regular y completo e ininterrumpido de las hembras domésticas sanas y bien alimentadas. La principal leche de consumo humano en España es la leche de vaca, seguida de la leche de oveja y de cabra. Cuando se modifica su composición, sustrayendo su fracción grasa se denomina leche desnatada. Según el CAE la leche desnatada que se comercialice tiene que tener como máximo un 1% de materia grasa, lo que va a determinar el menor valor energético de este alimento, respecto a la leche entera o semidesnatada (1,5% materia grasa). El consumo regular de leche por parte del hombre se remonta al Neolítico, aproximadamente 6.000 años a. de C. El hallazgo de pinturas rupestres en el desierto del Sahara indica que el ordeño existía hace unos 4.000 años a. de C. En el Antiguo Testamento se habla de la leche, describiéndose a la Tierra Prometida como tierra que mana leche y miel. En Roma y en Grecia la leche de vaca y la mantequilla no eran muy populares, pero la de cabra se empleaba en la cocina y para hacer quesos y la de asno y la de yeguas como medicina. Esto se debió a que la leche y la mantequilla no eran alimentos fáciles de conservar en el cálido clima mediterráneo, donde se usaba como grasa el aceite de oliva. Es más, los griegos y los romanos pensaban que beber leche era una costumbre bárbara. Según el escritor romano, Plinio, la leche se usaba para blanquear la piel de las mujeres y, además de Cleopatra, Popea, la esposa de Nerón, viajaba con cientos de cabras para bañarse en su leche. Por su parte, Marco Polo, quien viajó a China a finales del siglo XIII, descubrió que los tártaros, que tomaban leche de yegua, la secaban al sol después de separar la mantequilla y más tarde la bebían ligada con agua. Se encuentra disponible durante todo el año. Porción comestible 100 g por cada 100 g de producto fresco, 66 Kcal/100 g. La leche constituye el mejor aporte de calcio (121 mg), proteínas (3,3 g), yodo (90 mg), fósforo (92 mg) y potasio (150 mg) y otros nutrientes necesarios para la formación de huesos y dientes. Durante la infancia y adolescencia se aconseja tomar la leche entera, ya que conserva la energía y las vitaminas A y D ligadas a la grasa. En la edad adulta también es importante mantener un consumo adecuado, con el fin de favorecer la conservación de la masa ósea, contribuyendo así a prevenir la desmineralización de los huesos, causa frecuente de osteoporosis y fracturas. Este efecto cobra aún más importancia en las mujeres durante las etapas de adolescencia, embarazo, lactancia y menopausia. La grasa de la leche resulta fácil de digerir, ya que se encuentra en forma de pequeños glóbulos rodeados de una fina capa protectora. Sin embargo, dado el contenido calórico de la leche entera, personas con sobrepeso, obesidad y alteraciones de lípidos en sangre (hipercolesterolemia, hipertrigliceridemia), pueden optar por la leche semidesnatada (46 Kcal) o desnatada (34 Kcal), con menor cantidad de grasa y, en consecuencia, también de calorías y colesterol. A pesar de su valor nutritivo, la leche de vaca está contraindicada en algunas situaciones concretas, como en el caso de quienes sufren intolerancia a la lactosa, galactosemia y alergia a la leche. (Fuente: Fundación Española para la Nutrición).
  • Es un postre no demasiado calórico y muy nutritivo, rico en proteínas de origen animal de alta calidad y en grasas, mayoritariamente insaturadas pero también saturadas. Contiene lecitinas y fosfatidilcolinas que contrarrestan el colesterol que contiene. Vitaminas de todo el grupo B, incluida la B12, también A, C, D, E y K, y minerales (magnesio, potasio, calcio, fósforo, hierro, sodio, zinc, yodo y azufre). 
  • Comentarios para Deportistas: El importante aporte de proteínas animales de calidad, junto con los beneficios de la canela y el aporte de minerales, vitaminas y antioxidantes, que contrarrestan a los radicales libres que produce la práctica de ejercicio, hacen de éste un postre adecuado para la dieta base y de entrenamiento del deportista, especialmente para aquellos deportistas que siguen una dieta vegetariana o que son diabéticos. 
  • Aporte calórico: La receta completa aporta 584 Kcal más 25 Kcal por cada galleta (122 Kcal por ración).

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Natillas sin Azúcar Aptas para Diabéticos (receta de Puri)

Ingredientes (6 raciones): 700 g de leche semidesnatada, 3 huevos, 15 g de Maicena, 11 g de edulcorante líquido  (Ciclamatosodico+ Sacarina)...