Ingredientes (para 4 raciones):
Para los filetes: 4 Filetes de ternera (600 g), 1 huevo, 25 g de pan rallado para rebozar y 20 g de aceite de oliva virgen extra (para freír).
Para la salsa de limón: 1 cebolla (200 g), 2 dientes de ajo, un puñado de perejil fresco, 1 pastilla de avecrén, el zumo de medio limón, medio vaso de vino blanco (unos 50 cc), sal y 10 g de aceite de oliva virgen extra.
Elaboración:
De la manera tradicional: Los filetes: Se parte de filetes empanados: Se salan, pasan por huevo y finalmente, pan rallado. Se fríen en abundante aceite, se escurren bien y se reservan. La salsa: Con algo del aceite de la sartén, se hace un sofrito de cebolla y ajo y cuando esté trasparente la cebolla, se añade perejil picado, la pastilla de Avecrem, el zumo de limón y el vino blanco. Se deja evaporar el alcohol y se prueba (limón, sal, etc). Se meten ahí los filetes y se dejan hacer unos minutos (como cinco).
Con Thermomix: Los filetes se elaboran de la misma forma. La salsa: Poner 20 cc de aceite en el vaso, la cebolla en cuartos y el ajo e inicie "alta temperatura". Después mezcle bien y trocee 3, 4 segundos/velocidad 4,5 (con TM 6). Con TM 5o anteriores, trocee 3, 4 segundos/velocidad 4,5, y programe 15 minutos/120 grados/velocidad cuchara/giro inverso. Añada el perejil picado, la pastilla de Avecrén, el zumo de limón y el vino blanco y programe 5 minutos/120º//velocidad cuchara/giro inverso, sin colocar el cubilete, para que se evapore el alcohol. Programar otros 5 minutos, ya con el cubilete, a iguales velocidad, temperatura, etc.
Truco: filetes fritos en freidora y almacenan en una cazuela. La salsa se hace en sartén y se vierte sobre los filetes en la tartera, para que se humedezcan todos. Deben quedar medio cubiertos por la salsa.
- Estos filetes son aptos para Diabéticos (ajustando la ración a las calorías diarias permitidas) e Intolerantes a la Lactosa. No son aptos para veganos, vegetarianos ni Intolerantes al Gluten (hay una opción, si se reboza con harina de garbanzos, avena...).
- La carne de ternera, dentro del ganado vacuno, las carnes se pueden clasificar en carnes blancas y rojas. Las primeras se refieren a las procedentes de los animales jóvenes, como la ternera, mientras que las rojas se obtienen de animales maduros, es decir, vaca, buey o toro. Llamamos ternera a la cría hembra de la vaca. Es un animal de carne tierna y blanca, muy apreciada en la cocina. Dentro de la denominación de carne de ternera distinguimos la ternera de leche, animal que no ha cumplido el año de edad y que se alimenta exclusivamente de leche, proporcionando un color de su carne blanco rosáceo; y el añojo, que corresponde a la ternera o vacuno joven, entre 10 y 18 meses. La carne de ternera carece del olor característico de la carne de buey; es casi inodora, tierna y de fácil digerir. No es de extrañar por ello, que sea la de mayor consumo. Su estructura es fibrosa, por lo que es pobre en grasas. Los mejores cortes del animal son los que proceden de las piernas y el lomo; los mejores bistecs se cortan del lomo y del filete, no obstante sus vísceras también son muy apreciadas. En la cocina admite múltiples preparaciones; se puede asar al horno, hacer a la plancha o a la parrilla, guisar o freír. En España existe un gran número de razas de vacuno autóctonas, destinadas a la producción de carne de ternera; desde las razas Rubia Gallega, Asturiana de los Valles o Pirenáica de las zonas más norteñas, hasta las razas de las regiones más secas como la Morucha Salmantina o la Retinta o Avileña. La carne de ternera está disponible a lo largo de todo el año. Porción comestible 100 g por cada 100 g de producto fresco. La carne de ternera tiene un contenido en macronutrientes diferente en función de la edad de sacrificio y la pieza de consumo. Las partes más magras, entre las que se encuentran las utilizadas para ésta receta, con unas 110 Kcal/100 g, tienen alrededor de 6 g de grasa por 100 g de alimento completo, mientras que las de más contenido lipídico superan los 20 g por 100 g de alimento. La carne magra contiene un 21% de proteínas, superior al encontrado en las piezas con más grasa. Esta proteína es de alto valor biológico pues contiene aminoácidos esenciales en cantidades equivalentes a las necesidades del hombre. Independientemente de la pieza de consumo, la carne de ternera no contiene hidratos de carbono. La carne de ternera se puede considerar una buena fuente de minerales. El hierro hemo y el zinc de su composición presentan una biodisponibilidad notable respecto la de estos minerales en alimentos de origen vegetal. Es fuente de potasio, fósforo y entre las vitaminas las de mayor presencia son las del grupo B, en particular vitamina B12, niacina, vitamina B6 y riboflavina. Una ración de ternera aporta el 150% de las ingestas recomendadas de vitamina B12 para hombres y mujeres de 20 a 39 años con actividad física moderada. Para mejorar el perfil calórico de nuestra dieta actual se recomienda que a la hora de elegir la carne que vamos a comer, se opten por los tipos y piezas más magras, relegando las carnes grasas a un consumo más esporádico. (Fuente: Fundación Española de Nutrición).
- Este plato es rico en proteínas animales de alta calidad, calcio, sodio, potasio y fósforo. Contiene vitaminas (A, grupo B completo, C, D, E) y minerales (magnesio, hierro, yodo, selenio y zinc).
- Comentarios para Deportistas: Por su elevado aporte en proteínas animales de alta calidad y minerales, su bajo aporte en grasas, especialmente saturadas y carbohidratos de bajo índice glucémico, es un plato adecuado para la dieta de entrenamiento en deportistas, especialmente, para la comida posterior a un entrenamiento o competición.
- Aporte calórico: El total de la receta aporta: 982 Kcal los filetes y 236 Kcal la salsa. Total 1218 Kcal (304 Kcal por ración).
No hay comentarios:
Publicar un comentario