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domingo, 28 de julio de 2019

Espinacas con Pasas y Piñones

Ingredientes (2 raciones):

400 g de espinacas,  40 g de pasas, 30 g de piñones,  1 cucharada de aceite de oliva virgen extra  y sal

Elaboración:

En Thermomix: Introducir en el vaso de la thermomix el aceite y programar 1 minuto/100°C/velocidad 1. Introducir los piñones y las pasas y programar 30 segundos/100 °C/velocidad cuchara/giro inverso. Añadir las espinacas y programar 5 minutos/100 °C/velocidad cuchara/ giro inverso. (Nosotros hemos elaborado la receta en Thermomix).

De la manera tradicional: Freír los piñones y las pasas y añadir las espinacas para rehogarlo todo junto.
Servir caliente.
  • Esta receta es apta para vegana, vegetarianos, Intolerantes al Gluten, a la Lactosa, y Diabéticos (ajustando el tamaño de ración a las calorías permitidas).
  • Espinaca es el nombre común de una planta anual de la familia de las quenopodiáceas que se cultiva por sus hojas, nutritivas y sabrosas. Hoy se cultivan dos variedades de espinaca: la de hoja rizada que resiste el transporte sin apelmazarse ni echarse a perder, y se suele comercializar fresca y la de hoja lisa, fácil de lavar, que se comercializa congelada o enlatada. Los chinos cuentan con el primer registro de una de estas plantas en el siglo VII. En el siglo XI se introdujo en España, desde donde se extendió al resto de Europa. Estacionalidad Tradicionalmente se cultivan dos tipos de espinacas: las de verano, con semillas lisas y apenas resistentes a las heladas; y las de invierno, totalmente resistentes a las heladas, de semillas espinosas y, generalmente con hojas más lobuladas. Esto nos permite disponer de espinacas durante todo el año. Porción comestible, 81 g por cada 100 g de producto fresco, 31 Kcal/100 g (81% de porción comestible = 25 Kcal/100 g). El valor nutritivo de las espinacas radica en su contenido en vitaminas y minerales. En concreto, este alimento es fuente de folatos (140 µg), vitamina C (30 mg) y vitamina A (542 µg), vitamina E (2 µg) y algo de vitaminas del grupo B. Los folatos contribuyen a la formación normal de las células sanguíneas. La vitamina C contribuye a la protección de las células frente al daño oxidativo, al igual que la vitamina E. Por último, la vitamina A contribuye al mantenimiento de las mucosas, la piel y la visión en condiciones normales. También aportan alto contenido en b-carotenos (3.254 µg/100 g de espinacas crudas), compuestos que se transforman en vitamina A en nuestro organismo. Asimismo, contienen otros carotenoides sin actividad provitamínica A como la luteína (4.229 µg/100 g de espinacas crudas) y la zeaxantina (377 µg/100 g de espinacas crudas), que se encuentran en el cristalino humano y la retina, concretamente en la mácula (zona de mayor agudeza visual) cuya degeneración es la causa principal de ceguera en la edad avanzada. En cuanto a los minerales, cabe destacar que es fuente de potasio (423 mg) y hierro (4 g), «hierro no hemo» que se absorbe con mayor dificultad que la forma «hemo» existente en la carne y sus derivados. No obstante, algunos factores dietéticos —como la vitamina C presente en la espinaca— mejora la absorción del hierro, 90 mg de calcio y 55 mg de fósforo. Además, aportan una cantidad apreciable de fibra (6,3 g) (soluble e insoluble), que favorece el tránsito intestinal. En relación con este alimento, su contenido en ácido oxálico, se combina con minerales (hierro, magnesio, calcio, etc.) para formar los oxalatos, cristales que agravan la formación de cálculos renales). Además, aportan una cantidad apreciable de fibra (soluble e insoluble), que favorece el tránsito intestinal. (Fuente: Fundación Española de Nutrición).
  • El Piñón es la semilla propia de las especies del género Pinus (familia Pinaceae), procedente de la piña. Es de tamaño pequeño, forma alargada y color blanco, parecido en su sabor a la almendra, aunque más dulce y muy aromático. Alrededor de 20 especies de este género producen piñones suficientemente grandes como para que su recolección sea productiva; en otras, aunque también sean comestibles, son demasiado pequeños y sin valor para la alimentación humana. En Europa, los piñones proceden del Pinus pinea, pino piñonero, árbol originario de la cuenca mediterránea, de tronco grueso, que puede alcanzar más de 10 m de altura. Los piñones han sido valorados desde la antigüedad, época en la que acompañaban a los legionarios romanos en sus campañas y les servían de provisión, reconfortándolos con su sabroso sabor y su alto contenido proteico. Los nativos americanos del sudeste utilizaban los piñones para el tratamiento de la diarrea y hacían té de piñones para los dolores de cabeza. Este uso medicinal aún es utilizado. La campaña del piñón se extiende desde diciembre, cuando se produce la recogida del mismo, hasta finales de verano, cuando sale al mercado ya transformado. Porción comestible 100 g por cada 100 g de piñones sin cáscaras, 693 Kcal/100 g. Los piñones poseen un alto porcentaje de grasa en su composición (68,6 g), son fuente de grasas insaturadas, y algunos minerales y vitaminas. El alto aporte lipídico justifica su contenido calórico. Se trata del fruto seco más rico en grasa , después de las nueces de macadamia. Esta particular composición hace que se enrancie rápidamente, y más aún en presencia de oxígeno (aire), luz y altas temperaturas. La grasa insaturada alcanza el 89% del total de los lípidos, con predominio de los ácidos grasos poliinsaturados (60%) frente a los monoinsaturados (29%). Así, cabe señalar, que una cucharada sopera de piñones aporta el 60% de los objetivos nutricionales/día para hombres respecto al aporte en ácidos grasos poliinsaturados de la dieta. Sus proteínas (14 g%) son de origen vegetal, con un buen contenido en arginina. Respecto a los minerales, los piñones son fuente de fósforo, magnesio, hierro, zinc y potasio. Los aportes vitamínicos más considerables son las de tiamina, niacina y vitamina E. La tiamina contribuye al funcionamiento normal del sistema nervioso como la niacina, la vitamina E contribuye a la protección de las células frente al daño oxidativo. (Fuente: Fundación Española para la Nutrición).
  • Es un plato rico en fibra,  potasio, fósforo, magnesio, carotenos, vitaminas A, C y ácido fólico.  Contiene otros minerales (calcio, sodio, selenio,  yodo) y vitaminas (grupo B completo, E y K).
  • Comentarios para Deportistas: Es un plato ligero, que aporta antioxidantes, vitaminas y minerales. Todo ello lo hace interesante como parte del menú de la dieta pre entrenamiento y como comida pre competición.  
  • Aporte calórico: La receta completa aporta 507 Kcal, 253 Kcal por ración.

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